Las Alcaparras en Sal Primitiae Italiae (capullitos floreales de la planta Capparis spinosa) son cultivadas exclusivamente en Calabria. Recolectados a mano desde el mes de Mayo hasta el final del verano, antes de su conservación en sal, se tienden durante algunas oras sobre telas de algodón a la sombra, para así facilitar la desidratación dulce y lenta, necesaria para la perfecta conservación de sus propiedades organolépticas, para mantener olor, color, textura y sabor.

Antes de su confeccionamiento, las alcaparras se guardan en sal durante almenos un mes, con continuos removidos para garantizar una salazón y desidratación óptima y homogénea.

Se emplean para aromatizar variados tipos de platos típicos de la cocina mediterranea, y representan un optimo añadido al condimento para la pasta o al relleno de la pasta fresca o como oun ingrediente más para las pizzas. Indispensables para completar verduras asadas, sobre todo pimientos, para un irresistible “esgarrat” con ajo y bacalao. Son muy usadas también como ingrediente para platos a base de pescado azul, anchoas y sardinas, normalmente junto a las aceitunas, o en su sustitución, y en las ensaladillas.

Las alcaparras son protagonistas en la receta original para la preparación de la “caponata di melanzane”, típico plato de la gastronomía siciliana, pero también se usa en la preparación de gazpachos, cous cous, y de sabrosas salsa para condimentar la pasta, o para untar sobre el pan; podremos triturar las alcaparras y las aceitunas negras, en iguales proporciones, añadiendo aceite de oliva virgen extra hasta alcanzar una textura fluida y homogénea. Las alcaparras son indispensables en la preparación de irresistibles “focacce”, ensaladas frescas de arroz o ensaladas verdes veraniegas y mixtas todo el año.